11/29/2020

Octavo entremés

Ya lo sé, hoy tocaba episodio del Escuadrón Delta. Pero la genial Pepita Parker me dió una genial idea para las aventuras del Doctor SoyMalote y su fiel esbirro Aigor, así que no he podido resistir la tentación de grabarlo y subirlo del tirón. Espero que lo disfrutéis.

Versión audio:

Versión escrita:

Medianoche en el castillo del Doctor SoyMalote.

- ¡Aigor!
- ¿Siii, Amo?
- Nuestra nueva jefa de Recursos Inhumanos, la señorita Frau Blücher quiere hablar contigo.
- Por supuesto Maestro. ¿Qué se le ofrece, ama Frau Blücher?
- ¡Aigor! ¡Esto es imperdonable! Según mis datos, su contrato se rige por el convenio de esbirros y lamebotas, lo que le otorga quince días de vacaciones al año.
- Correcto ama.
-  Según las normas de la empresa debe cogerse cinco días en Halloween, otro cinco en la Noche de Walpurgis y el resto puede colocarlos a su discreción. No puede acabar el plazo fiscal sin que haya usado todos los días que le quedan.
- Cierto, señorita Frau Blücher, pero...
- Sin embargo, está a punto de expirar el año y ¡usted aún no ha consumido esos días! ¿A qué es debido esa indisciplina?
- Es que no he podido cogerme ni un solo día, por necesidades del Proyecto, ama. Hemos ido de emergencia en emergencia y…
- ¡Qué incorrección! Debe usted cogerse todos los días que le restan, inmediatamente.
- Pero tengo quince días acumulados y solo faltan diez para que se cumpla el plazo.
- No hay problema, a partir de ahora sus días duran 5 horas, así que en las próximas 15 horas habrá usted consumido todas las vacaciones que le restan. Después de eso sus días volverán a durar las 24 horas preceptivas.
- Pe..pe...pero…
- Bwahahahaha!

11/22/2020

Séptimo entremés

 Seguimos con las desventuras del Doctor SoyMalote y su fiel esbirro Aigor, una vez más enfrentandose a la imposible hoja de requisitos de un nuevo proyecto.


VERSIÓN AUDIO:

 VERSIÓN TEXTO:

Medianoche en el castillo del Doctor SoyMalote.

- ¡Aigor! Uff, mejor hoy no grito mucho, menudo dolor de cabeza tengo.
- ¿Sí, amo?
- ¿Cómo va el desarrollo de la nueva arma que le encargué?
- Pues la verdad maestro, aún estoy tratando de descifrar la hoja de requisitos del proyecto. Tal vez podría usted ayudarme.
- Pero si está super claro. Yo mismo acordé las especificaciones con el cliente durante la reunión de ayer noche.
- Entonces eso explica, por qué los requisitos están escritos en una servilleta de bar. ¿Y estos son manchas de cerveza klingon?
- ¡Error total! Es cerveza romulana. Y haz el favor de centrarte. A ver, ¿qué es lo que no entiendes?
- Si descifro bien su letra, aquí dice que quiere un ¿“superarma, chupi guay de la megamuerte”?
- Es evidente que lo quiere el cliente es un arma de alta tecnología.
- Ya veo Maestro, pero es que luego pone que tiene que tener, y cito literalmente “un extra de... ¿brilli-brilli?”.
- ¡Estás tonto, Aigor! Claramente está pidiendo un arma que dispare rayos laser. Y que se vean bien los rayos, que sean de un color vivo.
- Claro Maestro. ¿De qué color los quiere? ¿Azul, verde, rojo?
- ¿Lo preguntas en serio Aigor?
- ¿Rojo, verdad Amo?
- Por supuesto, nosotros somos los malos.
- Y por último... ¿A qué se refiere con lo de “tiene que hacer pium, pium”?
- Es obvio, que quiere que haga un sonido molón al disparar Aigor. ¿Acaso no has aprendido nada en todos estos años que llevas a mi servicio?
- Sí Maestro. He aprendido a no asustarme de las especificaciones imposibles.
- No te pases de listo, Aigor. Y ya que estás mira a ver en si nuestro laboratorio maléfico tenemos alguna sustancia ultra secreta para combatir la resa… quiero decir, la jaqueca.
- Se refiere a que vaya a la farmacia más cercana a por un paracetamol, ¿verdad Amo?
- De verdad Aigor, que le quitas toda la gracia al asunto de ser un científico loco.